El Grupo Provincial de Toma la palabra pedirá en el pleno de febrero instar a la Junta de Castilla y León a que garantice un servicio de enfermería para el aula sustitutiva de colegio de educación especial del colegio Pedro I de Tordesillas.
Aimar Abril, tordesillano de 14 años, lleva cinco meses sin asistir a clase por la falta de este servicio que precisa por prescripción médica.
Aimar está matriculado dentro del Aula Sustitutiva de Colegio de Educación Especial (ASCEE) del Pedro I y, a principio de curso, el servicio de neumología infantil del Hospital Universitario de Salamanca que le atiende habitualmente le prescribió un servicio de enfermería sin el que Aimar no podría asistir a clase.
La existencia del servicio de enfermería está garantizada en los centros de educación especial donde el alumnado presenta problemas de salud crónicos que requieren de una atención, control e intervención específica, y las ASCEE deben estar dotadas de los mismos medios para que los niños y niñas que viven en el medio rural tengan los mismos derechos; sin embargo, en el aula sustitutiva del colegio Pedro I no se dispone de este servicio.
A pesar de estar amparados por la ley y que otros colegios como el del Obispo Barrientos en Medina del Campo sí cuenta con este servicio de enfermería, la familia de Aimar apenas recibió una contestación verbal a través del equipo psicopedagógico del colegio denegándoles el servicio con el que ya debería contar el aula. Les ofrecen, a cambio, otras dos opciones que rechaza: matricular a Aimar en un centro de Educación Especial en Valladolid e internarle durante la semana en Casa Cuna ya que el transporte diario es inviable; o integrarse en el servicio de educación domiciliaria. La familia rechaza ambas opciones ya que ni Aimar está enfermo ni debe ser apartado de sus compañeros y amigos, tan solo exige tener derecho a las mismas oportunidades que sus compañeros.
Por eso, desde el Grupo Provincial Toma la Palabra piden que la Diputación de Valladolid reconozca el derecho de la familia de Aimar a elegir centro educativo para su hijo y su deber de escolarizarlo, además de instar a la Junta de Castilla y León a que garantice un servicio de enfermería para el aula sustitutiva de educación especial del colegio Pedro I de Tordesillas para que Aimar pueda asistir a clase y el colegio público de Tordesillas pueda garantizar los derechos educativos de los niños con discapacidad de la comarca.