Aimar, que nació con una parálisis cerebral, lleva cuatro meses sin asistir al colegio ante la negación de la enfermería escolar que precisa por prescripción médica.
La familia solicitó por escrito a la directora provincial de Educación el apoyo de enfermería escolar que Aimar, de 14 años, necesita dentro del colegio donde está matriculado y del que es alumno desde hace varios años, y apenas recibieron una contestación verbal a través del equipo psicopedagógico del colegio denegándoles el servicio con el que ya debería contar el aula, al tratarse de un aula sustitutiva de colegio de educación especial dónde asisten varios niños del ámbito rural con necesidades especiales.
A la familia se le ofrecen a cambio otras dos opciones que rechaza: matricular a Aimar en un centro de Educación Especial en Valladolid e internarle durante la semana en Casa Cuna ya que el transporte diario es inviable; o integrarse en el servicio de educación domiciliaria, servicio orientado a niños enfermos que no pueden acudir al colegio, con la presencia de una profesora dos días a la semana dos horas.
La familia rechaza ambas opciones ya que ni Aimar está enfermo ni debe ser apartado de sus compañeros y amigos, tan solo exige tener derecho a las mismas oportunidades que sus compañeros.
Desde el Ayuntamiento de Tordesillas se presentó una moción aprobada por todos los grupos, instando a la Junta de Castilla y León a poner este servicio en dichas aulas para que los niños del medio rural tengan la misma igualdad de oportunidades y no se les discrimine por su lugar de residencia o condición y fue denegada por la Consejería de Educación.
Tordesillas Toma la Palabra convoca concentraciones en apoyo a Aimar y reivindicando su derecho a ir al colegio en la Plaza Mayor de Tordesillas a las 12:00h del martes 2 de febrero y a la misma hora el miércoles día 3 en la Consejería de Educación.