Serán 13 las enmiendas que el grupo presentará este viernes 29 en el pleno provincial, por valor de 31.576.717 euros y centradas en otorgar a los ayuntamientos capacidad económica para dar respuesta a las necesidades inmediatas y reales de cada municipio.
Toma la Palabra reitera que los 600.000 euros destinados a presupuestos participativos suponen una «línea roja» para que el grupo apruebe el anteproyecto, pues se decidió por consenso de los cinco grupos que no se llevarían a cabo en 2020 tras la negativa experiencia de este año.
27/11/2019.- El Grupo Provincial de Toma la Palabra presentará este viernes en el pleno de la Diputación de Valladolid un total de 13 enmiendas al anteproyecto de Presupuesto 2020 de la administración, que suponen 31.576.717 euros. Son la respuesta del grupo ante un presupuesto «decepcionante», como lo ha calificado la portavoz de Toma la Palabra en la administración provincial, Virginia Hernández: «Después de tantos cambios y tantos retrasos, nos encontramos con que es muy similar al de años anteriores». En este sentido, ha señalado que «en el área que va a gestionar Ciudadanos apenas hay 200.000€ en gasto nuevo respecto a los planteados anteriormente por el Partido Popular y, en muchos casos, ni siquiera se mantienen las enmiendas de este grupo al presupuesto del ejercicio anterior». Hernández ha señalado, además, que «si los alcaldes y concejales de PP y Ciudadanos conocieran este presupuesto, no lo aprobarían».
Hernández ha repasado en rueda de prensa en la mañana de hoy miércoles algunas de las enmiendas que presentará el grupo, como la denominada Plan de autonomía financiera de los municipios de menos de 20.000 habitantes, dotada con 27.058.050 euros. El objetivo es transferir a los ayuntamientos dinero suficiente para que puedan invertirlo en las necesidades reales e inmediatas de cada municipio, sin que se les diga desde la Diputación cómo gastarlo. Esta partida incluye 7.009.950 euros para empleo público no dirigido, cantidad que permitiría crear en torno a 500 puestos de trabajo. El resto de la dotación de esta enmienda, 20.048.100 euros, se dirige a dar a los ayuntamientos la capacidad de administrarse económicamente a lo largo de la legislatura, en contraposición a lo que plantea la Diputación de Valladolid en su anteproyecto de Presupuesto 2020: partidas presupuestarias que, por una parte, limitan la capacidad decisoria de los ayuntamientos y, por otra, impiden la concurrencia de todos los municipios en igualdad de condiciones.
Las enmiendas vinculadas a vivienda cuentan con una dotación de 1.500.000 euros, de los cuales 200.000 euros irían a los ayuntamientos, para adquirir y acondicionar viviendas, para poner en marcha, así, su propio parque de vivienda pública. El resto, 1.300.000 euros, se destinarían al alquiler, rehabilitación y adquisición de viviendas por parte de particulares. En cuanto a telecomunicaciones, Toma la Palabra incrementa los 376.000 euros que la Diputación de Valladolid propone para llevar Internet a todos los pueblos hasta el millón de euros, una cifra más ajustadas a las necesidades reales de la provincia.
El resto de enmiendas se reparten entre apoyo a la creación de empleo privado (805.250 euros), actividades culturales y deportivas (468.417 y 319.000 euros, respectivamente), acción social (326.000 euros) y desarrollo rural (100.000 euros). Así, el presupuesto del Área de Asistencia Técnica y Cooperación a Municipios se incrementaría en un 37,9% (hasta los 36.539.598 euros), lo que supondría el 32% del presupuesto de la Diputación de Valladolid, que le otorga en su anteproyecto el 23,3% del total (frente a, por ejemplo, el 41,7% de Área de Hacienda, Personal y Promoción).
Los presupuestos participativos, una «línea roja» para Toma la Palabra
Hernández ha reiterado que la inclusión de una partida de 600.000 euros para presupuestos participativos representa una «línea roja» para que Toma la Palabra dé su aprobación al anteproyecto de Presupuesto 2020 de la Diputación. La portavoz del grupo ha hecho hincapié en que supone el incumplimiento del acuerdo al que llegaron los cinco grupos para entregar 1.200.000 euros a los ayuntamientos para libertad de gasto, pues dicha cantidad se reparte ahora entre presupuestos participativos y planes provinciales. Los cinco grupos habían consensuado que no se llevasen a cabo los presupuestos participativos en 2020 tras la negativa experiencia de este año, pues es necesario replantear cómo realizarlos.