Toma la Palabra considera que el cierre de consultorios médicos hasta octubre responde únicamente a una reestructuración encubierta de la sanidad rural en Castilla y León

Los alcaldes de San Pelayo, Tiedra y Villanueva de Duero remiten a la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, una carta en la que le piden que reconsidere su decisión, que supone una merma en la calidad de la atención sanitaria que recibirán los vecinos y vecinas del medio rural en la región


09/06/2020.- El pasado 2 de junio, la consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León anunció que mantendrá cerrados los consultorios médicos rurales, parados desde que se decretó el estado de alarma por la emergencia sanitaria, hasta el próximo mes de octubre. Para Toma la Palabra, esta decisión responde a «una reestructuración encubierta de la sanidad rural que comenzó hace tiempo y que se ha mantenido a pesar de la pandemia del Covid-19». Así se lo han hecho saber Virginia Hernández, Nunilo Gato y Edilberto Ruiz, alcaldes de los municipios vallisoletanos de San Pelayo, Tiedra y Villanueva de Duero, respectivamente, a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, a través de una carta que le han remitido y cuyo contenido suscribe también el alcalde de Castronuño, Quique Seoane. En ella, apelan a su condición de médica para instarle a que reconsidere su postura y reabra los consultorios a la mayor brevedad posible: «Usted sabe que la labor que realizan los médicos rurales supera la función sanitaria, ya que juegan un papel social que trasciende de lo sanitario, especialmente, entre la población de mayor edad».

Hernández, Gato y Ruiz subrayan en su escrito que «las consecuencias del cierre de los consultorios van más allá de las evidentes incomodidades que supone desplazarse a otras localidades para recibir atención sanitaria, pues afecta negativamente a la calidad de esa atención sanitaria que van a recibir los vecinos y vecinas de nuestros municipios». «No entendemos cómo se puede justificar el cierre de los consultorios rurales aludiendo a la inexistencia de dos circuitos diferenciados en ellos, mientras asistimos a la reapertura de establecimientos comerciales que tampoco los tienen», apuntan, además de resaltar que «desde la fase 0,5 se permite la apertura de los lugares de culto, que cuentan con un único punto de entrada y de salida». «Nos parece incoherente que se exija para nuestros consultorios médicos una medida que no se aplica al resto de locales y actividades», señalan. Una incoherencia que se repite, resaltan, en que no se restablezca la atención sanitaria durante la época estival, en la que los municipios de la provincia de Valladolid y del resto de la región sí podrán recibir la visita de turistas nacionales e internacionales.