La portavoz de la plataforma, Virginia Hernández, señala que la formación naranja, que justifica la suspensión de la convocatoria por la pandemia, «no ha entregado desde marzo ninguna documentación sobre esta cuestión» y que «podría haber trabajado en una fórmula que permitiese llevarlos de alguna manera a la era Covid, sobre todo, porque no sabemos cuándo terminará»
09/09/2020.- El Grupo Provincial Toma la Palabra lamenta «profundamente» que los presupuestos participativos de la Diputación de Valladolid no vayan a salir adelante tampoco en 2021, y achaca la suspensión de la convocatoria a la «nefasta gestión de Ciudadanos, más en concreto, la de la diputada Nuria Duque, al frente del Área de Empleo, Desarrollo Económico, Turismo y Participación», en palabras de su portavoz en la administración provincial, Virginia Hernández.
Por su parte, la formación naranja se excusa con la pandemia del coronavirus para justificar la paralización de estos presupuestos, a lo que Hernández responde: «El confinamiento no nos ha impedido seguir trabajando y, a pesar de que el reglamento se ha aprobado más tarde, se podría haber hecho más sencillo y flexible para poder ir reformándolo con los años, pero desde Ciudadanos no se ha entregado desde el mes de marzo ninguna documentación sobre esta cuestión». «De la misma manera que hemos adaptado los plenos a un formato online o hacemos reuniones de manera no presencial», añade Hernández, «Ciudadanos podría haber trabajado en una fórmula que permitiese llevar los presupuestos participativos de alguna manera a la era Covid, sobre todo, porque no sabemos cuándo terminará».
Los cinco grupos presentes en la Diputación de Valladolid consensuaron que no hubiera presupuestos participativos en 2020, puesto que el resultado de la primera convocatoria no había sido el esperado: «Todos estábamos de acuerdo en que necesitábamos un año para repensar estos presupuestos y que los hubiera en 2021, un consenso que Ciudadanos rompió unilateralmente para desarrollarlos este año, eso sí, previa usurpación de una importante partida de liberad de gasto que iba destinada a los ayuntamientos de la provincia». «Ahora, los hechos nos demuestran que no han tenido capacidad para ponerlos en marcha», apunta Hernández.
Toma la Palabra fue el único grupo de la oposición que apoyó la puesta en marcha de estos presupuestos en 2019, cuando se desarrolló la fallida primera convocatoria, ya que la plataforma considera «fundamental» la participación de vecinos y vecinas «tanto en la ciudad como en los pueblos», y subraya que «debe fomentarse desde las instituciones». «Pero, finalmente», comenta la portavoz de la plataforma, «nos hemos dado cuenta de que con los de Diputación ha pasado como con muchas de las cuestiones que dependen del Área de Empleo, Desarrollo Económico, Turismo y Participación: se han dejado pasar».
Toma la Palabra, además, denuncia lo sucedido en Simancas con una propuesta planteada por una asociación para la creación de un centro cultural en el municipio, proyecto seleccionado en la convocatoria de presupuestos participativos en 2019: «Esta iniciativa ha sido manipulada y desvirtuada por el ayuntamiento y la propia Diputación, que han firmado un convenio de colaboración para poner en marcha ese centro cultural pero con un planteamiento que nada tiene que ver con la propuesta iniciada hace casi dos años por la asociación».