PROPOSICIÓN PARA LA MODIFICACIÓN DE LAS CUOTAS MÍNIMAS DE ASISTENCIA EN LOS PROGRAMAS DE ACTIVIDADES DE LA DIPUTACIÓN DE VALLADOLID.
La provincia de Valladolid está formada por 225 municipios, de los cuales 4 superan los 20.000 habitantes, 8 los 5.000, 13 los 2.000, 16 los 1.000, 17 los 500, 10 los 400, 18 los 300, 23 los 200, 26 los 150, 35 los 100 y 56 tienen menos de 100 habitantes. De la observación de estos datos se obtiene que el grupo más numeroso, aun habiendo dividido en centenas el primer millar, es el de los municipios con menos de 100 habitantes y que más de la mitad de los municipios totales de la provincia tiene menos de 200 habitantes.
Es evidente que la despoblación y la escasa densidad de población en algunas zonas es el mayor problema al que se enfrenta nuestra provincia, porque sin gente no hay medio rural. Sin embargo, como ya hemos señalado en anteriores ocasiones, creemos que desde esta Diputación se podrían llevar a cabo medidas que, no solo apoyasen al medio rural en general, sino que fortaleciesen, en particular, a los municipios más pequeños, que son los más vulnerables, los más escasos de servicios y los más próximos a la desaparición.
Para que un pueblo sobreviva es necesaria la generación de empleo y la existencia de vivienda, pero también se hace imprescindible la dinamización de los espacios y las personas, de manera que a las personas que habitan nuestros pueblos no les resulte una condena el vivir allí, sino todo lo contrario.
En este sentido, no se puede decir que la Diputación de Valladolid no lleve a cabo talleres y programas de dinamización en nuestros pueblos y que no los lleve con éxito. Pero sí se puede decir que no todos los municipios de nuestra provincia tienen la posibilidad de acceder a ellos y son, precisamente, los municipios con menos servicios y oportunidades los que se quedan sin esa posibilidad.
Programas como las Aulas de Cultura o el Verano Activo, que además son programas consolidados que cuentan con gran éxito y acogida entre la gente de nuestros pueblos exigen un mínimo de 8 o 10 personas para su realización, con independencia de los habitantes que existan en el municipio. Esto significa que un pueblo como San Salvador, que cuenta según el INE con 32 habitantes, tiene que reunir a las mismas personas que un municipio como Tudela de Duero, que tiene 8.683. Lo que se traduce en que a los habitantes de San Salvador que, probablemente, tengan menos oportunidades y alternativas en su municipio, les estamos exigiendo la asistencia en más de un 30% de su población, mientras que en Tudela de Duero nos basta con que las personas que se apunten a las actividades no lleguen ni al 1% de su población total. O lo que es lo mismo, para que ambos municipios tuvieran las mismas oportunidades, se debería exigir que en Tudela acudiese un mínimo de más de 2.700 personas.
Evidentemente, estos cálculos de exactitud no tienen más sentido que poner de relieve la desigualdad existente en las oportunidades ofrecidas, no vamos a pedir que se siga este criterio, sino que se flexibilicen las cuotas con los municipios más pequeños, que son la mayoría, para que todas las personas puedan tener acceso a los programas de actividades de esta diputación.
Por eso, desde el Grupo Provincial Toma la Palabra presentamos la siguiente proposición:
Que la Diputación de Valladolid modifique las cuotas mínimas de asistencia en los programas de actividades que de ella dependan para facilitar que los municipios más pequeños puedan tener acceso a los mismos.